Infantil
Los más pequeños, tan llenos de luz, ilusión, juego.
Siempre he pensando que gran parte de los esfuerzos de la sociedad deberían estar centrados en preservar una infancia digna. Y con digna quiero decir libre para poder explorar libremente el mundo.
Al contrario, lo que ha ocurrido durante los últimos años, es que cada vez hay menos espacio para ser realmente niños.
El poco tiempo que les queda a los padres para poder disfrutar con sus hijos, las prisas del colegio, las clases extraescolares, la lejanía de la familia superior ha hecho que los niños cada vez estén más estresados, que a su vez los lleva a estar más desconectados emocionalmente, más tristes o más enganchados a las nuevas tecnologías.
Una etapa maravillosa para poder trabajar la inteligencia emocional
y mejorar las habilidades de comunicación.
Dos estrategias para facilitar su adaptación y funcionalidad a su vida.
Cómo vamos a hacerlo
Primera sesión con los padres
Se realiza una primera evaluación para recoger toda la información necesaria, sobre el embarazo, nacimiento, primeros años del menor y la situación problemática actual. También se trabajarán los miedos y necesidades de los progenitores que puedan estar afectando. La familia puede aportar toda la documentación previa que considere interesante.
Segunda sesión
El menor tendrá que venir acompañado al menos por uno de los dos padres, juntos compartiremos la explicación de por qué acudir a la psicóloga y cómo esto le podrá ayudar. Es muy importante que el menor entienda que todos somos un equipo, padres, terapeuta, profesores y niña/o, que trabajamos para ser más felices y vivir mejor.
Sesiones de devolución de información y establecimiento de objetivos
Después de llevar a cabo la evaluación habrá una sesión donde se explicará la problemática, se plantearán los objetivos y las herramientas para trabajar en casa.
Sesión de revisión de objetivos
Tras algunas sesiones, según considere el psicólogo infantil.
Padres separados
Muchas de las familias con las que trabajamos tienen padres separados o divorciados. En estos casos se pone más el foco en trabajar la colaboración y coherencia entre los padres. Las sesiones de padres las podrán hacer juntos y separados. Se les pedirá cooperación a ambos para el mayor beneficio del menor.
Intentamos ver el mundo desde sus ojos
Entenderlo y vivirlo tal cual ellos lo ven. Para conectar con ellos utilizamos el juego, las metáforas, el dibujo, la plastilina, los cuentos… desde ahí les ayudamos a mejorar sus habilidades y a entender mejor lo que les está sucediendo. No intentar entenderlos desde la posición adulta. Son ellos los que nos enseñan a nosotros.
Inclusión de la caja de arena
Se trata de una técnica maravillosa tanto para niños como para adultos. Con los niños permite explorar niveles más complejos o profundos de una forma muy poco invasiva. Ayuda mucho en el trabajo con traumas.
Terapia basada en la inteligencia emocional
Realizamos muchos ejercicios para facilitar que los peques mejoren su expresión emocional tanto dentro como fuera de la consulta.
Innovación
Técnicas de última generación aplicadas al contexto infantil. Aplicación de técnicas como Mindfulness, inteligencia emocional. Terapia EMDR para los niños que hayan sufrido trauma. El EMDR es una de las técnicas más eficaces para trabajar la sintomatología generada por acontecimientos traumáticos.
has llegado al lugar adecuado
para ayudarle
- Quiero que mejore su inteligencia emocional.
- Presenta miedos; a la oscuridad, a los transportes, a la separación…
- Tiene cambios en su patrón de sueño o de alimentación
- Es muy exigente y perfeccionista consigo mismo.
- Sufre o ha sufrido bullying.
- Le cuesta hacer amigos o no tiene.
- Muestra baja autoestima y se valora a sí mismo negativamente.
- Ha sufrido duelos o pérdidas recientes.
- Muestra dificultades de apego hacia sus padres, mostrándose o muy demandante o muy evitativo.
- Pega, muerde o se pone agresivo sin motivo aparente.
- Llora a menudo.
- Está nervioso o presenta ansiedad.
- Ha sufrido algun tipo de abuso sexual.
- Le resulta difícil expresar sus emociones.
- Le cuesta mucho dejar las pantallas o juega descontroladamente.
Durante la crianza de
los primeros años
- Os cuesta ponerle límites por miedo a dañar su autoestima.
- Os sentís desbordados
- Vuestro hijo no obedece ni sigue los límites.